Un poco de chocolate

Hace unos meses volvimos de viaje con un par de frascos de nutella de regalo (aunque acá se consiguen también) y, por más que nos encanten, es muy difícil terminarlos... ¡Recién vamos casi por el final del primer frasco!

Y el otro día se me ocurrió que una forma más "tranquila" para comerlo era hacer un postrecito. El típico postrecito de chocolate que a veces compramos en el supermercado, y que en realidad es tan fácil de hacer y sale tanto más rico que ni vale la pena comprarlo.

Pensé en hacerlo con un poco de chocolate amargo, porque el nutella en sí es bastante empalagoso y eso me hizo pensar que hacía muchísimo que no hacía nada con chocolate. Desde que terminé de estudiar chocolatería, el año pasado, que casi no hago nada con chocolate porque, la verdad, es que me cansa rápido. Y después de semanas enteras comiéndolo, tuve que dejarlo por unos cuantos meses.

Pero finalmente, aquí está. Hice una base de crema pastelera un poco más espesa y después le agregué el chocolate y el nutella. ¿El resultado? Una crema espesa y densa que van a querer volver a hacer. 

Cada tanto, un postre bien chocolatoso hace bien, ¿no?

Receta: Postre de chocolate y nutella

Salen 8 potecitos individuales

80 g chocolate

1/2 vaina de vainilla

80 g nutella

40 g maicena

350 g leche

150 g crema

100 g azúcar

2 huevos

Mezclá la crema, la leche y la mitad del azúcar y calentalo en una cacerolita, junto con la vaina de vainilla cortada al medio.

Apenas uní los huevos con la otra mitad del azúcar.

En otro bol, picá el chocolate y ponelo a baño María con el nutella, para que se derrita. No hace falta que esté al fuego, simplemente con que el baño María esté caliente, es suficiente para derretir el chocolate.

Volvamos a la leche: Cuando esté caliente, volcala sobre los huevos, mezclá y volvé a llevar todo al fuego hasta que hierva y espese. Ojo, que ni bien hierve, ¡espesa!

Cuando eso esté listo, mezclá todo con el chocolate y el nutella.

Esperá a que entibie y ponelo en potecitos individuales (bolcitos, tacitas, potes, lo que quieras). Llevá a la heladera un par de horas hasta que solidifique y... ¡listo!

Tip: Si querés que quede un poco más sólido, podés agregarle 3 o 4 g de gelatina sin sabor hidratada en 15 g de agua.